El 90% de las personas que están buscando trabajo se enfocan a los primeros pasos de esta búsqueda, eso es un currículum adecuado. Otro 50% restante se preocupa en prepararse adecuadamente para la entrevista, esto es, arreglarse efectivamente, ser asertivo, asesorarse en cómo desenvolverse en la entrevista qué contestar qué decir y qué no decir.
Es un porcentaje muy bajo el que se asesora cómo negociar efectivamente un sueldo y es entonces cuando se colocan en trabajos mal pagados simplemente porque no supieron hacer una negociación estratégica y adecuada, echando entonces por la borda todos los esfuerzos previos a esa oferta.
Que bueno, es verdad que si consiguió un trabajo, pero no ganando lo que querían o que creían que merecían.
No es difícil conseguir que te aumenten lo que te ofrecieron inicialmente si sabes negociar, para esto te damos las siguientes sugerencias:
1. El no ya lo tienes. ¿A qué me refiero con esto? Que no pierdes nada en pedir, acuérdate que si te hicieron una oferta es porque les gustaste tú por encima de los demás candidatos que se están entrevistando para el mismo puesto. También recuerda que en el pedir está el dar, entonces cuida lo que dices y ten mucho tacto para decirles que aspiras a mayor ingreso.
2. Evalúa tus aptitudes, esto es, define el valor de mercado de los servicios que das. ¿cómo es esto? Preguntando, cuánto vale el sueldo de un gerente de informática en empresa transnacional, y como respuesta vas a obtener un rango. El sueldo que te ofrezcan seguramente no va a salir de ese rango, lo único es que hay que procurar que sea lo más alto posible. Recuerda. Por muy bueno que seas para negociar nunca vas a poder ganar más que tu jefe. Llega un momento en que las empresas no pueden darte más.
3. Las empresas en sus puestos también tienen un rango definido, lo más seguro es que te den un monto bajo para dar opción a moverse. Entonces casi siempre hay espacio para moverse. A menos que te digan: Lo que te estamos ofreciendo está en nuestro rango máximo. No podemos darte más. Entonces no hay mucho que hacer.
4. Si lo que te ofrecen no te convence, y ya están en el tope máximo. La batalla no está perdida, hasta las políticas más estrictas son negociables, y en este caso si no te pueden dar un mayor sueldo y ellos están interesados, ellos están dispuestos a negociar. Porque les interesas. Negocia otras cosas. Como ascensos prematuros, bonos mensuales o trimestrales, mayores prestaciones, coche etc.
5. Ve preparado, planea con anticipación qué vas a decir y qué te van a contestar y qué les vas a contestar tú después. Esto es muy efectivo hasta cuando uno quiere pedir aumentos de sueldo. Planea todo el diálogo con anticipación, define qué objeciones te van a poner, y cómo las vas a contestar tú. Si de ese momento de la negociación depende por lo menos un año de ingresos que van a fijar tu calidad de vida, lo menos que puedes hacer es prepararte bien para que puedas conseguir lo que deseas.