Reciclar
es bueno para el ambiente y para los seres vivos. Al separar los distintos
tipos de materiales contribuimos a su reaprovechamiento, ya que al utilizar los
residuos se disminuye la necesidad de extraer nuevas materias primas y
elaborarlas. Por otro lado, se evita que estos elementos terminen en la basura,
con un grave impacto en el entorno. El reciclado de papel y cartón evita la
tala de árboles y la contaminación que genera el proceso de transformación de
la madera, y al aprovecharlos, se evitan emisiones de dióxido de carbono.
Los
expertos señalan que 150 kilos de estos materiales que se reciclen equivalen a
evitar la contaminación que generaría un auto al recorrer 800 km .
Avances
Con la
implementación cada vez más creciente de las nuevas tecnologías en la
sistematización de todos los procesos en las empresas se podría pensar que
hablar de reciclaje sería algo obsoleto.
Pero, por
el contrario, esta facilidad que los sistemas ofrecen puede llegar a generar
gran cantidad de desechos como consecuencia de una indebida utilización de los
medios de los cuales se dispone.
Hoy en día
en las oficinas de las grandes y medianas empresas se están interesando por el
tema del reciclaje a través de la
reutilización de las hojas, teniendo los mismos equipos de computación
pero haciéndole actualizaciones.
También,
donando los desechos de cartón seco a organizaciones que tienen programas de
reciclaje. Los especialistas señalan que la reducción en el uso y consumo de
materiales de oficina y la reutilización de estos deben ser prácticas comunes
en todas las áreas de trabajo, ya que ofrecen beneficios ambientales y económicos.
Entre
estos hábitos está utilizar el correo electrónico para el envío de comunicados,
memos y documentos que no sean confidenciales. Otras recomendaciones son
digitalizar y archivar los documentos; editar y corregir en la computadora e
imprimir sólo la copia final; y fotocopiar en ambos lados de las hojas. Con
estas acciones se reduce el uso del papel y de la tinta considerablemente.
Es posible
realizar de forma periódica el mantenimiento al sistema de aire acondicionado;
apagar las luces de la oficina cuando no se necesiten.
También,
apagar y desconectar los componentes de computadora y otros equipos de la
oficina al terminar la
jornada. Invitar al personal a utilizar en lo posible las
escaleras en vez del ascensor son prácticas que contribuyen a disminuir el
consumo de energía eléctrica.
Es
importante que todos los trabajadores conozcan cuáles son los materiales que
pueden ser reciclados. Se recomienda tener cerca del área de los contenedores
de reciclaje la lista: papel, plásticos, vidrio, cartuchos de tinta, cartón,
periódicos, revistas, aluminio y pilas.
Un poco de historia
El
aprovechamiento y reuso de los materiales ha estado presente desde el inicio de
la historia del hombre.
Los
arqueólogos han encontrado evidencias que señalan el origen alrededor de 400 A .C. Pero, tal y como lo
conocemos hoy, comenzó en el siglo pasado.
En New
York se abrió el primer centro oficial de reciclaje. Durante la Segunda Guerra Mundial
se incentivaba a la población a hacerlo. Con tubos de lápiz labial podían hacer
cartuchos de bala; con palas fabricar granadas de mano y piezas para tanques.
Se estableció el 17 de marzo como el Día Mundial del Reciclaje.
Las
estadísticas que maneja la
ONG Vitalis señalan que en Venezuela se recicla alrededor de
95% del aluminio, 90% de hierro, 25% de vidrio, 1% de materia orgánica, 20% de
papel y cartón, y 2% de plásticos.
Autor: Eden Valera
Especial para El Universal
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