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¿Te gustaría escoger a tus compañeros de trabajo?

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Cada vez más profesionales se deciden por una compañía en función del jefe que les toca. Y algunas empresas proporcionan herramientas para que sus empleados tengan voz en las nuevas contrataciones. 

El jefe y los compañeros de trabajo... No los elijes y pasas con ellos más horas que con tu familia o tus amigos. Las decisiones, cambios de humor y personalidad del primero influyen decisivamente en tu vida, y la relación con los segundos (o al menos con algunos) puede llegar a agobiarte.

Todos ellos te tocan en suerte, pero en el nuevo escenario laboral hay profesionales que sí tienden a escoger a quien les manda, e incluso llegan a rechazar un trabajo por incompatibilidad con el que dirige. 

Con los compañeros de trabajo (muchos de ellos ni son ni serán nunca amigos) tiende a pasar lo mismo: algunas compañías han decidido desarrollar programas en los que los empleados tienen cada vez más que decir acerca de las nuevas incorporaciones. Aunque en fase incipiente, podría decirse que es posible trabajar en empresas en las que puedes escoger a tus colegas de trabajo. 

The Wall Street Journal recordaba recientemente el caso de Amazon, donde un grupo de empleados tiene el encargo de elevar los estándares de reclutamiento y debe dar el visto bueno a las nuevas contrataciones. ‘Selectores’ cualificados Se trata de evaluadores cualificados que ocupan puestos a tiempo completo en la empresa en diversos departamentos y juegan un papel crucial cuando se trata de incorporar a nuevos empleados. 

Se encargan de entrevistar a los candidatos en otras divisiones de la compañía, y con una palabra pueden vetar a cualquier trabajador potencial, aunque su especialidad sea en un área que no tiene nada que ver con la del futuro empleado. Susan Harker, vicepresidenta de captación global de talento de Amazon, explicaba al WSJ que lo que se pretende es “ser tan objetivos y científicos en las contrataciones como sea posible. Buscamos optimizar las probabilidades de mantener empleados a largo plazo. 

En otras compañías tecnológicas se han implantado sistemas para identificar “a los mejores y a los más inteligentes”. Según WSJ, “Microsoft consulta a altos ejecutivos en los últimos pasos de selección de algunos candidatos; y Facebook plantea a algunos candidatos preguntas de programación difíciles o les pide soluciones para desafíos de negocios. 

Lo curioso en el caso de Amazon es que el grupo de empleados selectores se adscribe a un programa voluntario que no implica retribución adicional por desempeñar estas funciones –aunque puede llevar a obtener ascensos de forma más rápida–, y que supone evaluar hasta 10 candidatos, durante dos o tres horas cada uno, mientras se realiza el trabajo habitual. 


¿Es positiva la dureza? 

Para convertirse en un evaluador de Amazon, un empleado selector debe haber realizado decenas de entrevistas y también tiene que granjearse cierta reputación de entrevistador difícil y de ser capaz de identificar a nuevos candidatos que pueden convertirse en estrellas. 

Esta posibilidad de elección basada en entrevistas muy duras se justifica por la teoría de que las cuestiones complicadas son buenas herramientas para encontrar a los profesionales idóneos, porque ayudan a los futuros empleados a decidir desde el principio si han llegado al lugar en el que están dispuestos a trabajar realmente. 

Además, la incomodidad de ciertas entrevistas y herramientas de selección se ve en ciertos casos como un instrumento positivo, porque permite comprobar cómo reacciona el candidato cuando todo se complica. La presión para detectar la reacción puede resultar muy valiosa. 

Empresas sin jefes 

Estas posibilidades de elección de futuros compañeros por parte de los propios empleados son también propias de lo que se conoce como “empresas sin jefes”. 

No se trata de una utopía, sino de una realidad laboral implantada en determinadas compañías sobre todo del sector tecnológico que tienden a tener cada vez menos dirigentes y más responsables de su función, sobre la base de que evolucionamos hacia un mundo profesional con menos jefes, en el que la gran responsabilidad de los líderes es poner en marcha entornos en los que las cosas se hagan en unión de otros. 

Así se pueden citar los casos de 37signals o GitHub, ejemplos de start up que proponen una vida laboral sin mandos. La primera, fundada en 1999, crea aplicaciones para pymes y se caracteriza organizativamente por huir de las estructuras jerárquicas. 

Su estrategia de contratación se basa en fichar a “profesionales que sean capaces de gestionar ellos mismos, automotivados y que se sientan cómodos en un entorno laboral libre de jefes". 

El caso de GitHub –una empresa de software de colaboración creada hace seis años– es el de una compañía sin organigrama en la que los compañeros de trabajo ofrecen el feedback sobre el rendimiento de manera informal Y Valve Corp., dedicada a los videojuegos, no cuenta con promociones. 

Allí sólo hay nuevos proyectos, y para tomar una decisión sobre los sueldos, los empleados califican a sus colegas y se retribuye a quien más aporta, según la mayoría.


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Información publicada en: http://www.expansion.com/

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