No te preocupes, tu día no tiene por qué ser un completo desastre. De hecho, puedes recuperarte y salvar las horas que quedan; sólo necesitas re-enfocarte. Te compartimos cinco formas de rescatar la productividad en días como ésos:
1. Mantén las tareas rápidas cerca
Cuando se abra tiempo en tu horario, por ejemplo porque tu cita no llegó, de repente tienes tiempo de realizar otras tareas. Yo siempre cargo mi tablet, algunas tarjetas y sobres. Así, cuando tenga tiempo ‘perdido’ puedo hacer cosas como escribir emails, tarjetas de felicitación o notas a clientes, socios o empleados. Tener este tipo de elementos a la mano me permite mantenerme productivo y además hacer cosas que me ayudarán a sobresalir de la masa.
2. Evita problemas tecnológicos con la práctica
¿Alguna vez has pasado los primeros 20 minutos de una videoconferencia tratando de entender cómo funciona esa tecnología? Cuando pienso cuántas horas acumuladas he usado en este tipo de actividades, me siento abrumado. Si tienes una reunión o presentación próximamente en la que usarás una tecnología nueva para ti, agenda tiempo para practicar. Aparta la sala de conferencias, instala el equipo y haz todo el procedimiento antes de iniciar la junta. Practica cosas como usar el micrófono y revisar cómo se ve tu presentación en la pantalla.
No practiques con clientes importantes. Ayúdalos a verse bien mandándoles una agenda con las instrucciones y los materiales audiovisuales que necesitarán. Si estás familiarizado con el equipo, también manejarás mejor cualquier situación inesperada.
3. Reaviva tu confianza
A veces nos sumergimos tanto en lo que ocurre en el momento que olvidamos respirar profundamente. Cuando situaciones inesperadas ocurren, estresarse es una reacción natural. Sin embargo, recordar respirar profundamente puede calmar el momento y permitirte re enfocarte en hacia dónde quieres llevar tu día. Tomar respiros profundos mejora tu concentración e incrementa tu energía. Los cuerpos relajados también tienen mayor confianza en sí mismos, un punto muy necesario cuando las cosas se salen de control.
4. Anticipa emergencias
Repite lo que funciona y elimina lo que no. Esto asegura que no tendrás otro día lleno de situaciones fuera de control. Por ejemplo, ten un cambio extra de ropa en tu auto u oficina para que si se te derramas café no sea un desastre sin arreglo. Compra cargadores de celular para tu casa, oficina y bolso para mantenerte con batería donde estés.
5. Usa las cancelaciones como tiempo para pensar
¿Qué es lo primero que piensas cuando alguien te cancela una junta? Probablemente revisar tu mail o comprar un café. La mayoría de las personas regresan a hacer lo que estaban haciendo antes. Mejor, en lugar de revisar tus cientos de mails, tómate un tiempo libre para despejarte y pensar en proyectos a largo plazo. ¿Cuándo fue la última vez que tuviste tiempo ininterrumpido para pensar? Ése es el momento ideal para hacer movimientos significativos.
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