La llegada de un nuevo año siempre es sinónimo de buenos propósitos: dejar de fumar, apuntarse a un gimnasio, hacer voluntariado... Sin embargo, ¿te has planteado mejorar tus oportunidades laborales en el nuevo año?
Tener una mentalidad positiva y abierta para afrontar nuevos desafíos es el primer requisito para crecer como profesional. Además, esta actitud es especialmente importante en un momento como el actual, en el que muchas empresas se ven abocadas a introducir cambios en sus dinámicas y sus políticas de personal.
Tener una mentalidad positiva y abierta para afrontar nuevos desafíos es el primer requisito para crecer como profesional. Además, esta actitud es especialmente importante en un momento como el actual, en el que muchas empresas se ven abocadas a introducir cambios en sus dinámicas y sus políticas de personal.
Saber sobreponerse a la adversidad y aprovechar estos ajustes para mejorar el funcionamiento del negocio —optimizando el rendimiento de sus recursos o replanteando alguno de sus procesos internos para aumentar su eficiciencia, por ejemplo— no sólo constituye un valor añadido por parte del profesional, sino que se ha convertido en un rasgo muy codiciado por los responsables de recursos humanos.
De hecho, la posición descrita demuestra creatividad, flexibilidad y voluntad de adaptación por parte del trabajador.
Asimismo, los períodos de crisis suelen ser un buen momento para desplegar estrategias innovadoras que generen nuevos beneficios.
Aprende a sacar partido de la adversidad. Dale la vuelta a los problemas y conviértelos en una oportunidad de mejora. Aprovecha la situación actual para formarte y reorientar tu carrera profesional hacia los sectores laborales con más futuro, o bien para buscar nuevas fórmulas para tu negocio si eres autónomo.
Sé flexible. Ante cualquier transformación en tu empresa —un redimensionamiento, un cambio de departamento, la apertura a nuevos mercados, etc.—, no sólo debes adaptarte lo antes posible a la nueva situación, sino contemplar este cambio como una oportunidad. En efecto, una buena predisposición y una actitud entusiasta pueden ser la antesala de una promoción o de asumir responsabilidades más gratificantes.
Actualízate. ¿Te falta preparación? En la actualidad, ser un buen profesional implica especializarte, apostar decididamente por la formación continua y actualizar constantemente tus conocimientos. En este sentido, estudiar a distancia puede ayudarte a compaginar estudios y trabajo.
Gana en dinamismo. Atrévete a realizar varias tareas al mismo tiempo y muéstrate abierto para recibir formación por parte de tu empresa.
Disfruta de tu trabajo. Trata de buscar estímulos para tus tareas diarias y piensa cómo hacerlas más estimulantes. Trabajarás más a gusto, al tiempo que mejorarás tu rendimiento y tu nivel de estrés. ¿Qué tal un poco de música clásica para ayudar a concentrarte?
Imaginación al poder. Potencia tu creatividad buscando alternativas para desarrollar tu trabajo de manera más efectiva, ahorrando tiempo y reduciendo el esfuerzo realizado compañeros. Y si estás en paro, replantea tu búsqueda de empleo, e incluso, plantéate la posibilidad de convertirte en tu propio jefe y crear tu nuevo negocio.
Información publicada en: http://www.quecursar.com
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